Las alarmas de marcha atrás son dispositivos que avisan a las persona que un vehículo está retrocediendo. Las alarmas de pitido o Bip se introdujeron en Europa en los años setenta. Significaron un gran avance en seguridad, sin embargo, con el paso del tiempo se ha demostrado que presentan una serie de problemas, especialmente debido al impacto acústico medioambiental, pero también en términos de seguridad, la razón misma por la que se introdujeron originalmente. Hoy contamos con una alternativa mucho mejor.
Las alarmas de marcha atrás con sonido direccional de multifrecuencia bbs-tek® de Brigade, utilizan una amplia gama de frecuencias de sonido blanco, permitiendo que las personas puedan localizar instantáneamente de dónde y de qué dirección viene el sonido. Gracias al sonido de banda ancha, también pueden oír la alarma los trabajadores con auriculares protectores y personas con problemas auditivos.
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